En los umbrales del siglo XXI, la adopción es un tema que está presente muy vívidamente en distintos ámbitos, con una vigencia social indiscutible, ya que cada vez son más numerosas las familias que gracias a ella se conforman, y muchos los niños que logran imbuirse en una familia que, aunque extraña a su origen, ha de brindarles el amor y protección que su familia primitiva no quiso o no pudo darles. La adopción es un tema de mucha relevancia, no sólo en el ámbito jurídico, sino también social y psicológico, ya que implica formar familias donde el vínculo biológico no existe; son personas que provienen de mundos distintos, pero que encuentran en esta institución la forma de realización personal que implica darle a un niño una familia de la que está carente, y a su vez, cumplir con el sueño de ser padres. Así, esta institución involucra los tres aspectos antes mencionados, estudiando en esta investigación sólo el ámbito jurídico, sin menospreciar de ningún modo los demás, sino sólo con el objeto de analizar más acabadamente cómo el derecho recoge la adopción, y más precisamente, dado el propósito de esta investigación, cómo la jurisprudencia de nuestros tribunales aplica la legislación atinente a esta tema, específicamente las dos últimas leyes chilenas de adopción. Para llegar a esto se estudiará el concepto de adopción, las variaciones y concordancias que respecto de él tienen los autores, su naturaleza jurídica y sus fines, estos últimos muy variables en el tiempo. Luego, la evolución histórica de la institución, analizando por supuesto, a Roma, cuna y origen de nuestro derecho, pasando luego a Francia, cuyo Código sirvió de inspiración al nuestro, para finalmente llegar a Chile y sus distintas leyes, haciendo hincapié en las dos más recientes, la N° 18703 y la N° 19620, viendo cómo acogen los principios imperantes en el mundo. Dadas todas estas relevantes razones, es notable la constante falta de unicidad en el tratamiento jurídico de la adopción - desde la primera ley que la reguló, la N° 5343 de 1934 hasta la actual N° 19620, con disparidades que parten desde la raíz misma de la sociedad chilena y su manera de entender lo que es la familia durante las distintas épocas de nuestra historia - redundando esto en una ausencia de términos unívocos en la materia, que van desde una disparidad de conceptos técnicos relativos a los distintos tipos de adopción, pasando por el diferente estatuto jurídico aplicable y la manera en que se considera a los hijos adoptados, el régimen filiativo aplicable y sus consecuencias en materias de derecho privado, por ejemplo, el ámbito sucesorio. Con el transcurso de los años ha ido variando la institución misma y sus efectos, partiendo por considerar que el Código Civil de Bello no contempló la adopción, situación que recién cambió por la dictación de leyes posteriores, como son la Ley N° 5343 de 1934, sustituida por la Ley N° 7613 de 1943, que se mantuvo vigente hasta el 26 de octubre de 1999. Esta ley consideraba a la adopción como un contrato entre adoptante y adoptado que no generaba para este último el estado civil de hijo del primero, sólo creaba entre ellos los derechos y obligaciones que la misma ley establecía. Con el propósito de resolver esta situación se dictó la Ley N° 16346 de 1965 que, no obstante mantener la adopción de la Ley N° 7613, estableció la “legitimación adoptiva”, que tenía por objeto conceder el estado civil de hijo legítimo de los legitimantes adoptivos. Luego se dictó la Ley N° 18703 de 1988, que será objeto de nuestro análisis jurisprudencial, que derogó la ley anterior, manteniendo vigente la ley N° 7613, estableciendo dos clases de adopción: simple y plena. La adopción simple no confería el estado civil de hijo de los adoptantes, pero permitía a éstos tenerlo a su cuidado en su hogar, con obligación de criarlo, alimentarlo y educarlo por lo menos hasta la educación básica o hasta que tuviera su profesión u oficio. El adoptante pasaba a tener la patria potestad y los derechos y obligaciones que el Código Civil establece entre padres e hijos. En cambio, la adopción plena creaba para el adoptado el estado civil de hijo legítimo de los adoptantes, con derechos y obligaciones inherentes a dicha calidad. Finalmente llegamos a la ley que nos rige en la actualidad, la N° 19620, inspirada en la Convención de Derechos del Niño y con el influjo de la Ley N° 19585, de Filiación, en cuanto a consagrar la igualdad de los hijos biológicos, que motivó también su extensión en materia de adopción adquiriendo por tanto la calidad de hijo respecto del adoptante. Precisamente en relación a este último tema se intentará determinar si realmente la Ley N° 19620 acoge los principios que inspiran la Ley de Filiación, fundamentalmente la igualdad de los hijos, pero también es relevante el interés superior del menor, consagrado en la Convención de Derechos del Niño. En cuanto al análisis jurisprudencial se buscará determinar el comportamiento de los jueces frente a los distintos tipos de adopción que la Ley N° 18706 establecía, como también los temas pertinentes a adopción internacional, que en un mundo cada vez más globalizado presenta una mayor incidencia, lo que redunda en que se presentan situaciones donde se debe hacer valer en Chile una sentencia de adopción dictada por un tribunal extranjero, sus requisitos, como también las exigencias para que extranjeros adopten a niños chilenos. Asimismo, se pretenderá esclarecer, mediante el análisis jurisprudencial y legal, el distinto tratamiento jurídico que se le ha dado a la adopción desde el año 1988 a la fecha, es decir, con las dos últimas leyes de adopción que se han promulgado. Por tanto, la relevancia que presenta el tratamiento de la adopción como tema central de esta memoria está orientado fundamentalmente al análisis de la jurisprudencia de los tribunales relativa a la materia en comento ya que, sin lugar a dudas, es un aspecto que se deja de lado en las memorias y textos a los que se tiene acceso, situación que no deja de ser negativa, pues no sólo la arista doctrinaria es importante, sino también el cómo los jueces y magistrados plasman la teoría en los casos reales. Para este fin es útil contar con material anexo, consistente en sentencias de distintos grados jurisdiccionales, para poder darnos cuenta de la forma como se enfrenta un tema tan trascendente en una sociedad, y poder, cualitativa y cuantitativamente, efectuar comparaciones y establecer tendencias sobre los distintos temas que se abordan, los conflictos, las instancias que más conocen de ciertas materias. Además, vital importancia reviste la adopción internacional, puesto que en ella convergen muchas más dificultades y diferencias que en la adopción nacional, partiendo desde la distinta nacionalidad entre adoptante y adoptado, su idiosincrasia y religión, como también la constante preocupación por evitar el contrabando de niños y usos ilícitos de la institución para beneficio lucrativo de unos pocos, excluyéndose, de este modo, el principio rector de la institución, cual es, el interés superior del menor. Por ello se analizan las diferentes posturas de los autores en relación al concepto de adopción internacional, su evolución a través del tiempo, sus antecedentes, actuales tendencias y las Convenciones Internacionales que actualmente la regulan, muchas de ellas ratificadas por nuestro país y que tienden a proteger a la niñez y respetar sus derechos, además de la forma en que la jurisprudencia responde frente a ella en casos de exequátur y exhortos internacionales sobre adopción